Monetarismo
Introducción
El Monetarismo es una escuela de pensamiento económico que tuvo sus inicios en las décadas de cincuenta y sesenta, con una mayor predominancia en el mundo académico en los setenta. El principal pensador, y al que podríamos llamar el padre del Monetarismo, es el economista y profesor de la Universidad de Chicago, Milton Friedman. Éste junto a Karl Brunner, Allan Meltzer, y los colaboradores y estudiantes de los mismos, fueron los que lograron que el Monetarismo se afianzara como la primera gran escuela crítica del Keynesianismo.
Éstos criticaron a la teoría Keynesiana, entre otras cosas, por no tomar en cuenta las variaciones de la oferta de dinero como determinantes en el consumo general de una economía y también por su excesiva confianza en lo que el gobierno podía lograr con las políticas fiscales.
La relación entre cambios en la oferta de dinero y el consumo agregado
A pesar de que Keynes había dicho que la política monetaria sería de poca ayuda en la Gran Depresión- en una economía en donde los intereses de los "government securities" ya estaban bajos y los bancos no estaban muy dispuestos a hacer préstamos por razones no relacionadas a la escasez de recursos- los keynesianos más fundamentalistas hicieron de esta idea- de la poca utilidad de la política monetaria- como algo fundamental en el Keynesianismo.
Otra gran cantidad de economistas creían que realmente debería existir una relación entre las variaciones de la oferta de dinero y la demanda agregada, pero debido a las estimaciones econométricas que mostraron que la relación entre los tipos de interés y el consumo era débil, éstos creían que habría que darle mayor importancia a la política fiscal.
Los monetaristas no se conformaron con esto y presentaron sus propias estadísticas mostrando que las variaciones en la oferta de dinero importaban más que nada cuando hablamos de su efecto en el consumo general (ver "A Monetary History of the United States 1867-1960"; Milton Friedman y Anna J. Schwartz; Pinceton University Press; 1963).
Éstos afirmaban que la neutralidad del dinero tendría que mantenerse al menos en el largo plazo, por lo que en el largo plazo un aumento en la oferta de dinero tendría que necesariamente aumentar los precios. Pero este aumento general en los precios sólo podría ocurrir a través de un aumento en el valor del consumo agregado ¿Y cómo aumentaría este valor de consumo agregado? La única manera que podría aumentar es a través de un aumento en la oferta de dinero, según los monetaristas, aunque hallar cómo realmente esto ocurre pueda ser difícil. Es decir, si los precios aumentan proporcionalmente a cómo lo hace la oferta de dinero, y los precios aumentan sólo si el consumo agregado-es decir lo que gastan los agentes en una economía- aumenta, el consumo agregado tiene que aumentar antes que lo hagan los precios digamos y esto es posible gracias a un aumento en la oferta de dinero. Hay más dinero en una economía dispuesto a ser gastados por los agentes.
Largo plazo vs Corto plazo- o cómo diría Keynes:"In the long run we are all dead"
Otra de las grandes críticas por parte del Monetarismo al Keynesianismo es su excesivo enfoque en el corto plazo. Éste primero utilizó una teoría pre-keynesiana, en donde se estudiaban los salarios y precios una vez que se haya llegado al equilibrio, ya que afirmaban que la teoría económica tenía mucho más para decirnos de cómo se comportaban estas variables, una vez que hayan llegado a ajustarse, que en el proceso de ajuste. Los monetaristas hacían enfásis que el obsesivo enfoque cortoplazista de los keynesianos haría que los continuos estímulos de demanda, resultaran en un aumento de la inflación importante(predicción que comprobó ser correcta- parcialmente al menos cómo ya hemos visto- en los setenta). La idea principal del Monetarismo de lograr una estabilidad monetaria en el largo plazo con una inflación sostenida era vista con buenos ojos en los setenta. Período que las políticas públicas con sus estímulos de demanda fallaron en bajar el desempleo y lograron una gran inflación.
Las expectativas
Las expectativas en la teoría keynesiana no están totalmente ausentes. Pero debido a su análisis en el corto plazo, Keynes debió tomar las expectativas del público en un momento determinado como dadas(esta idea de expectativas como dadas en el análisis keynesiano la he leído varias veces, todavía no comprendo realmente el significado e importancia que tenía en el análisis keynesiano tomar éstas como dadas y no ajustarlas- quizás las expectativas no se podían ajustar porque el público no cambia sus expectativas en un corto período de tiempo).
El análisis monetarista, por el contrario, consideraba el ajuste de las expectativas del público en el tiempo, cómo algo fundamental para que la economía pudiese ajustarse para llegar a un equilibrio competitivo. Esta herramienta que el Monetarismo incorpora a su análisis es un claro punto a favor, para mí, ya que cómo afirma Woodford, éstos fueron los primeros en incorporar,en modelos, el ajuste de las expectativas en respuesta a la experiencia, en el análisis macroeconómico.
El cambio en la curva de Phillips
La curva de Phillips, creada por el economista neozelandes William Phillips en 1959, muestra la relación inversa que hay entre el desempleo y la inflación- en realidad la curva de Phillips original mostraba la relación entre el desempleo y la rapidez porcentual con la que cambian los salarios, pero Samuelson, en el sesenta y algo, cambió esta segunda variable por la inflación directamente. Phillips observó en su famoso paper The Relation between Unemployment and the Rate of Change of Money Wages Rates in the United Kingdom, 1851-1957 (1958) que existía un "trade-off" entre la rapidez con que cambiaban los salarios y el desempleo. Es decir, uno, teóricamente, tendría qué elegir qué preferiría, una inflación alta y desempleo bajo, lo contrario, o alguna especie de combinación entre las dos- en donde no se llegaría a un nivel bueno en ninguna de las dos variables.
La idea principal tras la curva es que si uno trataba de bajar el desempleo demasiado, habría más trabajadores empleados- lo que aumentaría la demanda agregada y por consiguiente, elevaría la inflación- y éstos tendrían un poder de negociación para aumentar sus salarios mayor, ya que no hay muchos trabajadores- con el desempleo muy bajo- con capacidad para tomar su puesto de trabajo.
Friedman, por el contrario, argumentó que en el largo plazo no había un "trade-off" entre el desempleo y la inflación. En el corto plazo si lo había, y este "trade-off" dependía de las expectativas que el público tendría sobre la inflación, es decir, dependía de la inflación que los consumidores esperaban. Es por esto, explicaba Friedman, que la data histórica que mostraba la supuesta fuerte relación inversa que había entre las dos variables en realidad mostraba un período en donde las expectativas de inflación se habían mantenido relativamente estables en un período en donde los precios también lo habían hecho.
La idea fundamental de Friedman es que en el largo plazo, a pesar de que se trate de bajar el desempleo con varios estímulos de demanda que tendrán como costo una mayor inflación, el nivel de empleo que se logré nunca será mayor al que se podría haber logrado con precios estables. Se puede interpretar de la siguiente manera: Si el gobierno intenta indefinidamente bajar el desempleo, en el largo plazo el desempleo se va a mantener en su llamado nivel natural o "Non-accelerating Inflation Rate of Unemployment" y la inflación seguirá aumentando eternamente.
Lo importante es destacar que los descensos en el desempleo son puramente transitorios, porque una vez que se logra bajar el desempleo a costo de una mayor inflación, los trabajadores ajustarán sus expectativas de acuerdo a la nueva inflación, esto hará que los costos de las empresas aumenten-ya que los trabajadores demandarán un salario acorde a la nueva inflación- y que el desempleo vuelva a su estado natural. Este estado natural del desempleo es el que tendría que estar la economía en el largo plazo si ésta opera a su máxima capacidad.
La curva de Phillips pasa de ser una curva a una recta.
Curva de Phillips en el corto plazo
Curva de Phillips en el largo plazo con sus respectivos desplazamientos de su versión en el corto plazo.
Friedman anticipó la "stagflation" de los setenta, ya que afirmó que un período que tenga un sostenido aumento de inflación, es decir un período en donde el público espere que la ya alta inflación de hoy será menor a la de mañana, llevaría a un cambio en el "trade-off" haciendo posible un período en donde tanto la inflación como el desempleo se vean incrementados(igualmente este punto me gustaría tocarlo un poco más a fondo en otro post, ya que todavía no comprendo como puede una economía estar en un nivel de desempleo diferente a su nivel natural).
Los problemas de los setenta, que quizás respondan a mi duda, son los siguientes:
- La inflación medianamente alta en los sesenta permitió que las expectativas de la inflación en los setenta fueran del mismo nivel.
Woodford hace enfásis en la importancia de tomar en cuenta las expectativas endógenas, claramente demostrada en la correcta predicción de la "Stagflation". Y también destaca Woodford que sirve como un buen ejemplo en donde la teoría económica resultó de mayor ayuda para predecir un evento que la simple extrapolación de las correlaciones históricas.
Influencia del Monetarismo
Después de haber demostrado con gran certidumbre la importancia de las políticas monetarias en el nivel general de precios, en el consumo de una economía, y en la importancia de sus herramientas, el Monetarismo se convirtió, a mediados de los setenta, en la nueva escuela ortodoxa.
Ya no había dudas, por parte de los hacedores de las políticas, luego de los setenta, que las consecuencias de las políticas macroeconómicas para el control de la inflación, eran su problema principal. Y también fue aceptada la idea de que para ver qué nivel de inflación estaba realmente siendo causada por una determinada política, había que esperar que las expectativas del público se adaptarán.
El aparente triunfo de las ideas monetaristas no significó la desaparición de la economía keynesiana. Al contrario, el Keynesianismo en los setenta incorporó en sus modelos las principales ideas monetaristas. Es más, por lo que plantea Woodford, la incorporación de estas nuevas ideas fue relativamente sencilla. Se determinó a la política monetaria como la principal determinante de la demanda agregada dentro del modelo IS-LM. Y en la curva de Phillips simplemente lo que tuvieron que agregar es la idea del nivel natural de desempleo relacionando el desempleo con la inflación relativa a las expectativas de inflación, y agregar una ecuación que tomará en cuenta el ajuste de las expectativas endógenas de acuerdo a la experiencia y listo. No tengo ni idea cómo habrán agregado a sus modelos estas nuevas herramientas, pero no parecen ser algo muy complicado de incluir en sus modelos.
Woodford termina afirmando que el hecho de que los monetaristas quisieran volver a un análisis económico pre-Keynesiano hizo que sus análisis se basen en modelos de una sola ecuación en vez de modelos que tomaban en cuenta una simultánea determinación de varias variables. Esto hizo que el análisis monetarista no llamará mucho la atención porque cómo afirmó Harry Johnson: "The monetarist counter-revolution has served a useful scientific purpose, in challenging and disposing of a great deal of the intellectual nonsense that accumulates after a scientific revolution. But its own success is likely to be transitory, precisely because espoused a methodology that has put in conflict with long-run trends in the development of the subject".
Es así, que según Woodford, la batalla metodológica fue ganada por el Keynesianismo que supo adaptarse e incorporar las nuevas ideas monetaristas sin perder la base que lo caracteriza.
Fuente:
Micheal Woodford, "Revolution and Evolution in Twentieth-Century Macroeconomics", 1999